El delegado del Gobierno reitera que Gobierno de España no tiene ninguna deuda con la Xunta de Galicia respecto al Fondo de Competitividad

02/06/2011

Respuesta a las afirmaciones de la conselleira de Facenda


Cortizo apunta que supeditar el cumplimiento del objetivo de déficit en Galicia a este argumento es otro ejemplo del victimismo con el que actúa el gobierno autonómico en este tema

El delegado pide a la Xunta que actúe con responsabilidad en el cumplimiento del acuerdo marco y de los objetivos de déficit aprobados por todas las Comunidades en el Consejo de Política Fiscal y Financiera

“Pedir lealtad institucional a la Xunta es una utopía pero, al menos, la verdad es una exigencia inexcusable”, afirmó Cortizo

El delegado del Gobierno en Galicia, Miguel Cortizo, reiteró hoy que el Gobierno de España no tiene ninguna deuda con la Xunta de Galicia respecto al Fondo de Competitividad incluido en el Sistema de Financiación Autonómica, “lo que no se puede decir a la inversa”, y recomienda a la conselleira más prudencia y más rigor evitando la búsqueda de pretextos que exculpen su propia gestión.

Ante las tan reiteradas afirmaciones de la conselleira de Facenda de la Xunta de Galicia y de otros responsables del Ejecutivo Autonómico, el delegado del Gobierno recuerda a la Xunta que lo que tiene que hacer es actuar con responsabilidad en el cumplimiento del acuerdo marco de reducción de déficit público y de los objetivos concretos aprobados por todas las Comunidades Autónomas en el Consejo de Política Fiscal y Financiera. También le pide que no eluda sus obligaciones y responsabilidades con el objetivo de estabilidad económica vertiendo acusaciones que no responden a la realidad. Supeditar posibles incumplimientos del límite de déficit a una inexistente deuda con la Xunta de Galicia es un ejemplo más del oportunismo y de la actitud victimista que está adoptando el Ejecutivo gallego en la gestión de las cuentas de la Comunidad y en cualquier otra área en la que tenga que escamotear sus responsabilidades.

El delegado del Gobierno aclara, una vez más, que el actual Sistema de Financiación, aprobado por las Cortes Generales y aceptado por todas las CC.AA. en 2009, incorpora dos fondos para compensar los desniveles que pudieran producirse entre autonomías: el Fondo de Competitividad y el Fondo de Cooperación. El Fondo de Competitividad, al que aluden las acusaciones de la Xunta, compensa a las comunidades a las que el Sistema, tal y como está establecido, aporta menos recursos por habitante que la media.

Por lógica presupuestaria, pero también porque así lo establece la norma legal, hasta que no se liquida cada ejercicio (de ingresos y gastos), no se puede saber cuánto de uno u otro Fondo hay que utilizar para compensar a las Comunidades. Y esa liquidación se hace dos años después de cada ejercicio, por lo que la liquidación del año 2011 corresponde hacerla en el 2013.

Es cierto que, en los dos primeros años del Sistema de Financiación existió un periodo transitorio en el que el Estado aprobó anticipos a cuenta de esos Fondos. Por tanto, los anticipos se limitaban a los ejercicios de 2009 y 2010. Y, según la ley, el anticipo relativo al ejercicio del año 2009 se liquida este año 2011 y el anticipo relativo al ejercicio de 2010 se liquidará en 2012. 

De hecho, en este año 2011, el modelo de financiación está aplicándose plena e íntegramente y la ley no permite ya efectuar anticipos, que corresponderían a una liquidación que debe hacerse en 2013. Esta realidad es conocida por todas las Comunidades Autónomas desde septiembre del año pasado.

Por ello, el delegado del Gobierno reitera que no es cierto que el Gobierno de España adeude cantidades a la Xunta de Galicia por lo que es irresponsable que se reclamen estas cifras y, más aún, vincular la estabilidad presupuestaria de Galicia a una falacia que, por más que se repita, sigue careciendo de fundamento de ningún tipo.

“La única deuda -sin entrar, por decoro, en las que mantiene la Xunta de Galicia, que sí es morosa con el Estado- es la de la pretendida lealtad institucional de la que presume la conselleira, como mejor aval de una acusación irresponsable, desleal e inexacta”, apuntó el delegado.