Javier De Andrés: “El ranurado de la pista garantiza la plena operatividad del Aeropuerto de Hondarribia, igual que antes de adecuar su longitud”
26/10/2017
- El Delegado del Gobierno en el País Vasco ha visitado esta mañana los trabajos para ranurar de forma transversal la capa de rodadura de la pista, lo que mejorará su capacidad de fricción y frenado en condiciones de lluvia
- Las obras estarán terminadas para finales de año, momento en el que Hondarribia obtendrá la certificación europea sobre seguridad operacional y Vueling podrá volver a operar su ruta diaria con Barcelona con los Airbus A-319
“El ranurado de la pista garantiza la plena operatividad del Aeropuerto de Donostia-San Sebastián en condiciones similares a como estaba antes de su adecuación de longitud”. Así lo ha asegurado esta mañana el Delegado del Gobierno en el País Vasco, Javier De Andrés, en su visita a las obras que se están llevando a cabo en el aeródromo guipuzcoano.
Los trabajos, adjudicados por Aena a la UTE Proyseda-Díez por un importe de 440.434 euros y un plazo de diez semanas, estarán acabados antes de finalizar este año, momento en el que el Aeropuerto de Hondarribia obtendrá, tras el reciente recorte de la pista, la certificación europea sobre seguridad operacional.
El proyecto incluye el ranurado transversal de la capa de rodadura de la pista de vuelo 04-22, a toda la longitud de pista pavimentada (1.754 metros) y en toda su anchura (45 metros), y de la superficie de las plataformas de viraje en ambas cabeceras. Se mejora de esta forma su capacidad de fricción y frenado en condiciones de lluvia. Asimismo, se repondrá la señalización horizontal de pista de vuelo correspondiente al estado de partida de las obras.
Pese a la necesidad de adecuar la longitud de pista para cumplir con la normativa europea, el Delegado del Gobierno ha garantizado que “los aviones que operan en el Aeropuerto de Hondarribia van a poder seguir aterrizando y despegando en condiciones similares a las que había con anterioridad”.
Tras la decisión de Aena de acortar la pista en 300 metros, 150 por cada extremo, la compañía Vueling, en una reunión celebrada el pasado mes de julio con el Delegado del Gobierno y responsables de Aena, solicitó el ranurado de la pista como condición necesaria para seguir operando en Hondarribia.
“Entendimos la necesidad de la compañía y por ello dimos prioridad y urgencia a la petición de Vueling. Aena realizó en su día estudios sobre el pavimento para ver la posibilidad de que, a pesar reducir su longitud, el ranurado de pista garantizase un frenado óptimo y permitiese seguir operando a los aviones Airbus A-319 que utiliza Vueling”, ha recordado De Andrés, que en su visita ha estado acompañado por el Director del Aeropuerto, José Manuel Sánchez.
Durante el tiempo que duren las obras, los vuelos con Barcelona seguirán siendo operados por la compañía Vueling, pero con los aviones ATR-72 (aeronave turbohélice de 72 plazas) de la compañía Air Nostrum, con quien ha alcanzado un acuerdo. Una vez finalizado el ranurado de la pista, Vueling volverá a operar con el Airbus A-319, según confirmó en su día la compañía.
De Andrés ha agradecido la confianza de Vueling por seguir operando el vuelo Donostia-Barcelona y confía en que el Aeropuerto de Donostia mantenga su incremento en pasajeros. En 2016 registró 264.422 viajeros, la mejor cifra de los últimos cinco años, y todo apunta a un nuevo record. Desde enero hasta septiembre lo han utilizado 210.932 pasajeros, un 5,7% más que el año pasado.
En el mes de septiembre, la subida ha sido del 3,9%, con un total de 25.158 pasajeros. La terminal situada junto al Bidasoa mantiene durante todo el año conexiones regulares con Madrid y Barcelona y en la temporada estival añade a su programación enlaces a Londres y Palma de Mallorca.
De Andrés ha recordado el compromiso del Gobierno de España, a través del Ministerio de Fomento, con el Aeropuerto de Hondarribia. “Hasta 2021 se invertirán casi 4 millones de euros en importantes mejoras y se están llevando a cabo todas aquellas actuaciones necesarias para consolidar e incrementar su competitividad. Si a este esfuerzo inversor le sumamos el interés de viajeros y de compañías, su futuro inmediato es muy esperanzador”, ha concluido.