El Delegado respalda la actuación de la Guardia Civil que, recuerda, “está al servicio de los ciudadanos y del ordenamiento jurídico vigente”

26/04/2013

El Delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, ha comparecido hoy en rueda de prensa para explicar los sucesos acontecidos anoche tras el asalto masivo a la frontera por parte de un grupo de entre 150 y 200 inmigrantes, de los que unos 70 lograron rebasar con éxito las lindes fronterizas.
El Barkani ha explicado los detalles del asalto fronterizo, que se produjo sobre las 22.00 horas de ayer noche, por la zona conocida como Villa Pilar, próxima al Aeropuerto de la ciudad.
Tal cual ha precisado, los inmigrantes llegaron provistos de algunas escaleras para superar la valla de 6 metros de altura que separa a Melilla de Marruecos, y aprovecharon el cambio de turno en los servicios fronterizos de la Guardia Civil para practicar el asalto.
Como consecuencia, ocasionaron desperfectos en el sistema anti-intrusión del vallado fronterizo.
Además, en las labores de interceptación de los inmigrantes, un policía nacional resultó lesionado con contusiones leves, y dos guardias civiles igualmente lesionados por mordeduras.
También seis inmigrantes tuvieron que ser asistidos en centros de urgencia por contusiones leves, siendo dados de alta poco después.
En su comparecencia, el Delegado ha defendido la labor de la Guardia Civil, que recordó “es la encargada de velar por la integridad de las fronteras terrestres y marítimas de Melilla y es la que controla el sistema anti-intusión, que precisamente existe para garantizar la defensa de nuestros límites fronterizos, lo que –precisó- es una encomienda legal y necesaria para la defensa general de los intereses de nuestro país”.
“La Guardia Civil –añadió- está al servicio de los ciudadanos y actúa en defensa del ordenamiento jurídico vigente”
Por ello, explicó que si la Guardia Civil actuó en la casa de un particular en la que se habían refugiado una treintena de inmigrantes, fue “para conminarlos a que salieran de allí y proteger a la familia que habita dicha vivienda. En ningún caso –aclaró- se usó violencia pero sí la necesaria fuerza –que no violencia, no confundamos- para proceder al desalojo de los inmigrantes de una propiedad privada”.
Por tal motivo, el Delegado catalogó de injusto el intento de “criminalización que algunos pretenden hacer de las Fuerzas de Seguridad y ,en especial, de la Guardia Civil, a la que –señaló- doy todo mi apoyo”.
En el mismo sentido, calificó de inadmisible que “se cargue contra la Guardia Civil y se ponga en entredicho su labor, cuando no hace otra cosa que defender la integridad y propiedades de una familia española cuya vivienda había sido ‘tomada’ por los inmigrantes”.
El Delegado quiso hacer hincapié en que “hacer demagogia fácil a partir de la solidaridad mal entendida que representa la invocación de los derechos humanos sin tener en cuenta más consideraciones, es jugar a una burda trampa que no favorece los intereses de nuestra ciudad”.
“La Guardia Civil, la Policía y esta Delegación del Gobierno somos tan sensibles como el que más ante la tremenda tragedia humana que representa el fenómeno extremo de inmigración desesperada hacia Melilla, pero esa sensibilidad –subrayó- no nos puede amedrentar en la obligada defensa de nuestra legalidad vigente, en los intereses de nuestra ciudad y, por ende, en los de nuestro país”.
Abdelmalik El Barkani también quiso poner el acento en que “el drama de la inmigración no puede servir para doblegarnos ante el chantaje que promueven las mafias, usando a embarazadas o menores, o poniendo en riesgo la vida de seres humanos en los dobles fondos que habilitan en los automóviles a modo de auténticos ataúdes”.
Igualmente, consideró que tampoco podemos quedar impávidos ante “los intentos organizados y masivos de quienes llegan violentando nuestras fronteras de forma organizada y enfrentándose abiertamente a la Guardia Civil y resto de fuerzas y cuerpos de seguridad, bien en los asaltos a la valla, bien conduciendo coches kamikaces, bien embistiendo con las pateras a las patrulleras de los GEAS”.
“No todos los inmigrantes vienen agrediendo ni con cuchillos o palos como los que traían los ocupantes de la patera del pasado domingo, pero, desgraciadamente –apostilló-, estamos ante un perfil de inmigrante más joven, más preparado físicamente y dispuesto a penetrar en la ciudad a costa de lo que sea. Y esto, me refiero a admitir que entren a costa de lo que sea y luego sólo prevalezca la voz de la defensa de los derechos humanos, no es algo que se pueda consentir”, reflexionó el Delegado.
Además y en su opinión, resulta evidente que los sucesos acontecidos anoche “ponen de manifiesto una vez más” lo que viene diciendo repetidamente, es decir, que “la presión migratoria sobre Melilla no ha descendido ni un ápice, a pesar de la efectividad de la Guardia Civil y la cooperación de Marruecos”, que ha logrado “evitar que los asaltos de este tipo se reproduzcan con más frecuencia”.
Por ello, anunció que se va reforzar la plantilla de la Guardia Civil en Melilla con una mayor presencia del helicóptero de seguridad y vigilancia, y nuevos destinos a la ciudad de una unidad de los Grupos de los Reserva y Seguridad de la Benemérita.
Finalmente, reiteró que la presión migratoria extrema sobre Melilla y las grandes bolsas de inmigrantes subsaharianos concentrados en el Marruecos cercano, no representan “un problema exclusivo de Melilla y Nador ni tampoco de España y Marruecos. Exigen de la mayor implicación de la UE y de medidas combinadas que al menos logren reconducir los flujos migratorios y rebajen la extrema presión migratoria sobre esta ciudad”.