La Delegación del Gobierno considera incomprensible que la Xunta de Galicia plantee ahora unas modificaciones al desvío provisional habilitado hace tres meses en Lourenzá (Lugo), máxime cuando estas entrañan riesgos para la seguridad vial

13/05/2011

  • Miguel Cortizo insta al Ejecutivo de Núñez Feijóo a que mantenga la misma colaboración y lealtad que ha mantenido siempre Fomento
  • El representante estatal destaca que la conexión provisional, que está en servicio desde comienzos de febrero facilitando el tráfico y los trabajos y sin que se hayan registrado incidencias en la seguridad vial, se suprimirá en julio próximo
  • Miguel Cortizo asegura que, a la vista de lo sucedido, sólo cabe interpretar que la Xunta está únicamente interesada en crear problemas al Gobierno de España, aún a costa de los intereses de los ciudadanos e incluso, como en este caso, a costa de su seguridad

En respuesta a la solicitud formulada por la Xunta de Galicia para que el Ministerio de Fomento modifique el desvío provisional habilitado en Lourenzá para conectar la autovía A-8 con la carretera N-634 a través de la vía autonómica LU-153, el delegado del Gobierno en Galicia, Miguel Cortizo, asegura que el departamento que dirige José Blanco ha actuado siempre con la máxima lealtad y coordinación con la Xunta de Galicia, a la que ha mantenido informada permanentemente sobre esta actuación.

Respecto a las modificaciones del enlace provisional que la Xunta de Galicia propone ahora para su propia red viaria, el delegado del Gobierno afirma que entrañarían riesgos para la seguridad vial de los usuarios, por lo que el Ministerio de Fomento en modo alguno va a adoptar una decisión que conlleve una rebaja en las medidas de seguridad vial. “Atopámonos ante un novo capricho administrativo proposto pola Xunta de Galicia, cunha total falta de seriedade e rigor técnico, co único propósito, unha vez máis, de atacar ao Goberno de España, aínda a sabendas de que carecen de razóns e fundamentos”, declara Miguel Cortizo.

El representante estatal le recuerda a la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas que, con la puesta en servicio de los tramos de la autovía del Cantábrico Barreiros-Vilamar y Vilamar-Lourenzá, lo que ha hecho el Ministerio de Fomento es completar un nuevo trayecto de este eje de gran capacidad de 9,2 kilómetros y, a su vez, eliminar el trazado antiguo de la carretera N-634 a su paso por Vilamar y Celeiro de Mariñaos, donde existían tres tramos de concentración de accidentes.

Esto ha supuesto que los aproximadamente 10.000 vehículos diarios que circulaban a través de ese tramo de carretera dispongan actualmente de una vía de alta capacidad cómoda y segura, para lo cual el Ministerio de Fomento ha invertido 88 millones de euros.

Para poner en servicio el citado tramo de 9,2 kilómetros, el proyecto de construcción del tramo Vilamar-Lourenzá preveía un desvío provisional consistente en conectar la A-8 con la N-634 a través de la LU-153. Miguel Cortizo le recuerda al Gobierno de Feijoo que técnicos de la Demarcación de Carreteras del Estado en Galicia mantuvieron reuniones previas con el Servicio de Infraestruturas de la Xunta de Galicia, el Ayuntamiento de Lourenzá y la Agrupación de la Guardia Civil de Tráfico, para informarles de la habilitación del citado desvío. Al mismo tiempo, el delegado manifiesta que, desde la entrada en servicio, el pasado 4 de febrero, de los nuevos tramos de la A-8, y transcurridos tres meses desde entonces, le llama la atención la propuesta que hace ahora la Xunta cuando en la conexión provisional a la que aluden no se han registrado incidencias en materia de seguridad vial.

Miguel Cortizo insiste en recordarle al Ejecutivo de Núñez Feijóo que el desvío habilitado es provisional y que está previsto que se suprima en julio de este año, momento en el que quedará conectada directamente la autovía A-8 con la N-634; “o que fai aínda máis inaceptable o comportamento da Xunta”.