Fomento instala 1.500 aspersores en los 6 viaductos de acceso a Reinosa de la A-67 para evitar el hielo sobre la calzada
24/11/2010
El delegado del Gobierno destaca la mejora que supone este sistema para la seguridad de los conductores durante los temporales de frío
- 4 estaciones meteorológicas y 4 sondas o sensores permitirán el funcionamiento automático de los mismos
- Además se han colocado 1.000 m. de barreras anti-ventisca en la A-67, N-611, N-623 y N-629 y de 230 m. de barreras anti-aludes.
El delegado del Gobierno en Cantabria, Agustín Ibáñez, señaló hoy en la Comisión de Vialidad Invernal que los 6 viaductos de la autovía A-67, entre Fombellida y Lantueno, cuentan ya con unos sistemas de riego por aspersión de salmuera (agua más sal) con el fin de prevenir la formación de capas de hielo sobre la calzada de esas estructuras. Los viaductos donde se han instalado un total de 1.500 aspersores (a cada lado de la calzada y en cada sentido de la circulación) son los de Marlantes, Cañeda, el Hayal, la Hía, Boca Sur y Boca Norte, cuya longitud acumulada es de 1.500 m.
Junto a las líneas blancas que limitan cada calzada se ha colocado, cada 4 m, un aspersor que lanza un fino chorro de salmuera sobre el asfalto, a muy baja altura de forma que pasa, prácticamente, desapercibido para el conductor y que evita la formación del hielo.
Cuatro casetas, situadas muy próximas a los viaductos, cuentan con todo el equipamiento necesario para su funcionamiento, tanto de forma automática como manual, y en función de la temperatura, la humedad ambiente y otros parámetros medio ambientales.
Juntos a las casetas se han instalado 4 estaciones meteorológicas y 4 sondas o sensores sobre la calzada para mediciones de parámetros en la propia calzada.
El funcionamiento del sistema de aspersión se puede establecer de forma automática o manual desde el Centro de Control de Túneles. Las casetas están conectadas con el centro de Control tanto por vía aérea, por GPRS, como por vía subterránea, a través de fibra óptica.
Los parámetros que se regulan o controlan son:
- Temperatura ambiente,
- Temperatura de la calzada,
- Humedad ambiente,
- Presión,
- Velocidad del viento,
- Pluviometría,
- Punto de rocío,
- Salinidad de la calzada.
- Dosificación de la cantidad de salmuera,
- Horarios de funcionamiento.
El objetivo de la instalación es el funcionamiento automático del riego de salmuera en aquellos puntos por donde, en muchas ocasiones, se inicia la disminución de la temperatura de la calzada, y, en consecuencia, el inicio de la formación del hielo. En este sentido los viaductos son la zona más sensible por su menor inercia térmica y el primer punto de la carretera en el que empieza a helar.
El proyecto se complementa con la instalación de 1.000 m de barreras anti-ventisca en las carreteras A-67, N-611, N-623 y N-629 y de 230 m de barreras anti-aludes de 3 m de altura, en boca de un túnel de la A-67, para evitar que la nieve caiga sobre la calzada en forma de alud.
El proyecto ha tenido un coste de 1.700.000 €.